La organización del mundo de una forma humano empieza por el control de los productores de sus propios productos y de sus trabajos, y las formas en que se realizan. De ahí que también la revolución social arranca del punto de vista del individuo real, que frente a la vida deshumanizada de la sociedad capitalista mercantil busca instalar la verdadera comunidad. Esto significa asimismo que la revolución no puede ser una abstracción, encarnada en un poder ajeno frente a lo que piensan, sienten, padecen disfrutan los seres humanos de carne y hueso. Hay que ir a la raíz, que no es otra que el trabajo sometido a la ley del valor el trabajo que solo vale en tanto productor de valor y que por tanto reproduce la relación de trabajo alienada.
Las parejas sentirán el poder y la atracción de este fenómeno cuando estén parados uno frente al otro, incluso a una distancia de una yarda o dos de distancia. A ciertas parejas les resulta todavía más simple sentir la energía circulando desde la distancia que cuando están en contacto físico. Conforme se aproximan físicamente, otras distracciones se interponen en el camino, quizá temores de ser realmente abiertos o bien miedos de no ser admitido por completo, o bien quizá el contacto físico sea tan compacto como para amortiguar las sensaciones más finas en el campo de energía entre los cuerpos. Por esta razón, el contacto poroso siempre y en toda circunstancia se recomienda cuando los cuerpos se enfrentan entre sí, como en un abrazo. Los cuerpos precisan ponerse en contacto extremadamente delicadamente; en caso contrario, las sensaciones más finas se ensombrecen fácilmente. En el momento en que un hombre te aprieta de manera firme en sus brazos durante un abrazo, no vas a poder continuar en sus brazos por bastante tiempo.Después de unos momentos, brota la necesidad urgente de regresar a su espacio por el hecho de que es demasiado físico, demasiado duro, y la sensación de ser abrazado no es tan agradable, no tras la alegría inicial del saludo y el beso. Debe haber una cualidad de porosidad en la que una persona respeta su cuerpo energético, que se extiende alén de sus límites físicos. En la situación porosa, un abrazo puede mantenerse a lo largo de horas conforme los cuerpos de energía se funden cada vez más de manera profunda entre sí. Por norma general, durante el contacto físico no pensamos en el cuerpo energético de una persona, mas todos tenemos uno, aunque algunos de nosotros somos más conscientes de ello y más sensibles que otros.No tras la alegría inicial del saludo y beso. Debe haber una cualidad de porosidad en la que una persona respeta su cuerpo energético, que se extiende alén de sus límites físicos. En la situación porosa, un abrazo puede mantenerse a lo largo de horas conforme los cuerpos de energía se funden cada vez más y más de manera profunda entre sí. Por norma general, a lo largo del contacto físico no pensamos en el cuerpo energético de una persona, mas todos tenemos uno, si bien ciertos de nosotros somos más siendo conscientes de ello y más sensibles que otros.No después de la alegría inicial del saludo y beso. Debe haber una cualidad de porosidad en la cual una persona respeta su cuerpo energético, que se extiende alén de sus límites físicos. En la situación porosa, un abrazo puede mantenerse a lo largo de horas conforme los cuerpos de energía se funden cada vez más y más de forma profunda entre sí. En general, durante el contacto físico no pensamos en el cuerpo energético de una persona, mas todos tenemos uno, aunque algunos de nosotros somos más conscientes de ello y más sensibles que otros.pero todos tenemos uno, si bien algunos de nosotros somos más siendo conscientes de ello y más sensibles que otros.pero todos tenemos uno, si bien ciertos de nosotros somos más siendo conscientes de ello y más sensibles que otros.
A una de ellas la tenía agregada en Fb, mas nunca nos habíamos conocido en persona, hasta que llegó el instante. Ocupaba un buen puesto en su trabajo, el auto del año que manejaba daba muestra de su coyuntura económica, mas ese detalle jamás me amilanó, solo me debía ajustar a su forma de charlar, de saber un tanto de sus gustos. Entonces no me fue difícil manejar la situación, en ciertas ocasiones pasó por mí a mi casa, otras nos encontramos a mitad de camino para luego llevarla en mi auto al acontecimiento o concierto que la había convidado, mas de forma especial jamás sentí que mi billetera necesitara ayuda, pues asimismo sabía decir no a determinadas asambleas que ella deseaba acudir. Yo debía supervisar la situación y no ella.
Natasha, una especialista en internet
Varón y mujer son el uno para el otro. Así lo afirma la naturaleza. Es suficiente con observar sus cuerpos para ver que el hombre fue diseñado para ingresar en la mujer y que esta fue diseñada para percibir al varón. No te lo pienses más. Telefonea a su agencia y pregunta por Mariam. Te apresará. Te seducirá. Te hechizará. Se transformará en tu droga. ¿Y qué alternativas hay? Tomás, un cronista gay, afirma que suprimiría los segundos que prosiguen al resultado en toda aventura sexual pues arruinan el tono romántico de la escena. Me siento igual que cuando voy sin bolsillos, ¿dónde demonios dejo las manos?. Si alguien representa perfectamente la sensualidad y el erotismo de la mujer venezolana ésa es Competición, esta joven y también irreprimible scort de piel de canela, mirada profunda y sonrisa traviesa y picarona que ha llegado a nuestra urbe para dejar en ella la huella de su carácter apasionado y ardiente.
Es una experiencia más allá y más alta que la expresión reproductiva convencional, que es más superficial. Al dejar que la fuerza de la vida se vuelva hacia adentro y hacia arriba, el hombre usa su pretensión para crear la base para las experiencias evolucionadas. Pasa de correr mecánicamente después de la eyaculación a ser consciente y presente en todos y cada momento, atento a las sutiles sensaciones que se desarrollan dentro de su cuerpo y su ser. Los resultados de este estudio sobre el orgasmo precoz femenino fueron los siguientes: el 40 por cien de las mujeres tenían orgasmos prematuros de vez en cuando; el 14 por cien los tenía habitualmente y el 3 por ciento los tenía siempre y en todo momento.
Otras prohibiciones asociadas a la sexualidad no nos parecen menos reducibles que el incesto al horror sin forma de la violencia. Es el caso de la prohibición que cae sobre la sangre menstrual y sobre la sangre del parto. Estos líquidos son considerados manifestaciones de la violencia interna. Por sí misma, ya la sangre es signo de violencia. El líquido menstrual tiene, además de esto, el sentido de la actividad sexual y de la mácula que de ella proviene; esa suciedad es uno de los efectos de la violencia. Y el parto no puede ser dejado fuera de ese conjunto: ¿no es en sí un desgarramiento, un exceso que desborda el curso de los actos que están dentro del orden? ¿No tiene el sentido de esa
Si explotas, que sea en mi boca
En mi respiración anidó una agitación confusa en la que convivían la excitación por lo contemplado y una mezcla indefinida de deseo y tabú que me estremecía hasta lo más hondo. Me sentí mojada y convulsa y decidí imitar a mi prima. Me quité las bragas, me abrí de piernas, puse cada una de ellas sobre uno de los reposabrazos del sillón de mimbre, cerré los ojos y, sin demora, llevé mis dedos cara el territorio en aquel momento pantanoso de mi coño. Chapoteaban allí mis dedos trémulos de cachondez cuando una mano imperiosa los detuvo. Entreabrí los ojos enfebrecidos y vislumbré la cabeza de mi prima metida entre mis piernas. Yo hice un pequeño movimiento para ofrendarle mejor aquella carne palpitante. puso el cojín estratégicamente a fin de que aquel machacar quedara mejor ofrecido al ansia devoradora de sus labios. Os contaré como enlace esta rutina con otras para cautivar a una mujer en la urbe de Málaga una noche. Las habíamos conocido en un lugar de copas y nos habían convidado a ir a otra disco que cerraba más tarde. Ya en la disco utilice como rutina de valor el abrelatas Creer en la Magia. Tradicionalmente, a las mujeres se les ha negado la posibilidad de gozar de su sexualidad. Así sea porque somos herederos de una fuerte tradición patriarcal en la que el disfrute es considerado pecaminoso o bien sucio, o por el hecho de que las mentes más progresistas de nuestra era moderna han humillado al sexo como una frívola herramienta del capital. Ser mujer y ser sexuada representa una incesante batalla contra el escarnio social.
¿Te animas a agradarme? Tengo unas caderas de infarto capaces de moverse hasta perder el control
¿Qué ocurre entonces? Que muchos hombres prosiguen pensando que la mujer no disfruta del sexo, y el pagafantas acostumbra a ser uno de estos hombres. Así, el pagafantas actúa con extrema precaución en este aspecto, eludiendo comunicar a la mujer que le gusta cualquier género de deseo sexual, pues lo último que desea hacer es que la mujer se sienta incómoda, tal y como si enseñar deseo por alguien sea algo malo. De nuevo, el pagafantas se pone en la piel de aquel chaval bueno de la clase que se mostraba benevolente con las chicas mientras veía como el chulito de clase se las llevaba a todas y cada una. Sosten la cabeza por las sienes y con un pulgar al lado del otro presiona en el centro de la frente, donde nace el pelo, desde el centro hacia afuera, en dirección cara la sien. Haz una línea imaginaria para recubrir toda la frente. Incluye las cejas. Bienvenido/a al bastante difícil, complicado y en ocasiones desagradable mundo de los problemas físicos íntimos. ¿Quién no se ha sentido acomplejado o bien acomplejada alguna vez? ¿Quién está libre de sentirse mal por tener un pene demasiado grande por ejemplo? ¿O bien unos pechos demasiado pequeñitos? En toda la serie de textos de confesiones que hemos publicado, con todo lo que nos contáis mediante las redes sociales o a través de una manera más segrega como nuestro correo privado, hay un tema que no podíamos dejar escapar, y es el de los inconvenientes físicos de carácter sexual.
Otra de las preguntas que encontramos en el texto El mito masculino y a la que respondieron estos 4000 hombres encuestados es la siguiente: ¿Qué podría hacer una mujer para excitarlo más? ¿Qué prefiere que lleve , qué ambiente le gusta más y de qué forma preferiría que actuase su pareja? Y claro, tú que estás todo el día pensando en esa persona, ¿qué harás? Pues mirar. Y mirar. Curiosear y ver todas sus fotografías, hasta llegar al inicio de su timeline. Mas eso tiene múltiples riesgos. El más evidente, y en el que no mucha gente repara, es que en el momento en que te metes a mirar un montón de fotos, llegas a perder la noción de dónde estabas. Y se te termina escapando un like. Y ahí la cagaste. Por el hecho de que un like a una fotografía no reciente solo significa una cosa: alguien ha entrado de forma directa en el perfil a mirar fotos. Por fortuna no acostumbra a tratarse de casos que se den con relativa frecuencia pero, cuando suceden, pueden significar un foco de enfrentamiento grave en la relación de pareja. El hombre se siente incomprendido y, muchas veces, en lugar de localizar un aliado y un refuerzo a su propia sexualidad dentro de la relación con la otra persona, se topa con actitudes prohibitivas que le repiquetean a vivencias de su infancia o bien adolescencia, donde la masturbación era algo perseguido por los adultos y censurado como un comportamiento inadecuado. Los viejos fantasmas represivos vuelven a manifestarse donde se suponía que no deberían existir. Y el conflicto es muy fuerte tanto cuando, de no cambiar la actitud negativa de la pareja en esta cuestión, este hombre se verá obligado, bien a negarse a sí mismo una importante de su sexualidad o, al contrario, bien a ocultarla y negar el hecho de que prosigue masturbándose. Y esto acostumbra a significar, a menudo, la creación de un espacio de silencio, desconfianza e incomunicación que puede, a la larga, destruir la comunicación sexual de esa pareja.